Conocer bien el mercado es la regla.
Antes de establecer una posición de compra o de venta, es importante conocer cuál ha sido el desempeño del activo que estás usando a lo largo del tiempo.
Para esto existen los análisis financieros, que son el estudio constante sobre los eventos que influyen en el mercado y, por lo tanto, en tus operaciones.
Independientemente de los activos que decidas usar, todos tienen una característica en común: reaccionan siempre ante diversos factores que debemos considerar.
¿Pero cuáles son esos análisis que nos permiten conocer tales factores? Te lo contamos a continuación…
En este análisis financiero se estudia el desarrollo de los mercados internacionales. Considera todos los hechos económicos, políticos y sociales que, a gran escala, podrían influir en nuestras operaciones financieras.
El objetivo del análisis fundamental es establecer “el precio justo” que, en teoría, debe tener una activo para saber si está sobrevalorado o infravalorado.
Si un activo está sobrevalorado, significa que su precio está por encima de su valor intrínseco. Pero si está infravalorado, se refiere a que su precio actual está por debajo del valor que representa.
En este último caso, apostar a que el precio del activo aumente podría ser una buena decisión ya que, según tu análisis fundamental, el precio aún no llega al valor que determinaste después de hacer tu investigación.
Sin embargo, el análisis fundamental está más vinculado a los inversionistas de largo plazo que a los traders, ya que estos primeros consideran variables como los estados financieros, planes estratégicos, entorno económico del sector y mercados propios del activo.
El análisis fundamental tiene dos métodos dependiendo del orden en que decidas realizar la investigación.
Top down (De arriba hacia abajo): aquí se hace un análisis desde lo más general hasta lo más específico. Se consideran primero variables macroeconómicas (situación global de la economía) y después microeconómicas (sectores de un país con mejores oportunidades de inversión).
Bottom-Up (De abajo hacia arriba): en este método se hace lo contrario al anterior. Se parte primero de las variables microeconómicas y luego se va a las variables macroeconómicas.
El análisis más usado por los trader es el análisis técnico, que consiste en evaluar el comportamiento histórico del precio de un activo para identificar las tendencias pasadas y así poder especular sobre su futuro.
Este tipo de análisis se concentra en la observación de patrones gráficos que se forman a partir de algoritmos o cálculos matemáticos. Allí se pueden observar todos los movimientos del precio que ha tenido un activo.
Los aspectos más importantes del análisis técnico son:
Gráficas: Son la base de este estudio. El reconocimiento de los gráficos por parte de un trader es lo que le permite detectar patrones y así intuir hacia donde irá el precio de un activo en el futuro.
Tendencias: Gracias al mismo estudio de las gráficas, un trader puede identificar cuales son los momentos frágiles o fuertes en los que se ha visto involucrado el precio del activo.
Oferta y demanda: el precio de todo activo financiero está determinado por la cantidad de personas que quieren comprarlo (demanda) y de quienes quieren venderlo (oferta). Si hay mayor demanda que oferta, el precio tenderá a subir, y viceversa.
Profundizaremos sobre todos estos términos del análisis técnico para hacer trading en el siguiente capítulo.
